Fotografías: Lina Scheynius |
" Cuando, tensas, haciendo una pausa, reflexionamos,
ya amanecía. June se metió vestida a la cama.
Empezó a besarme, diciendo:
"Qué pequeña eres, qué pequeña eres. Quisiera ser como tú.
¿Porqué soy tan torpe, tan desgarbada?
Podría partirte en dos".
Nos
besamos apasionadamente.
Adapté mi cuerpo a cada curva de su cuerpo, como
si me fundiera con ella. Gimió.
Su abrazo me rodeó con una multitud de
brazos; el mío fue una rendición embriagadora.
Me perdí.
Perdí la
conciencia en este lecho de carne.
Nuestras piernas estaban desnudas y
entrelazadas.
Rodamos y nos empujamos unidas. Yo debajo de June, y June
debajo de mí.
Me llovieron sus besos de mariposa, los míos la
mordieron.
-En este momento eres bella- me dijo.
-Déjame ver tu cuerpo, déjame besar tu cuerpo- le pedí"
-En este momento eres bella- me dijo.
-Déjame ver tu cuerpo, déjame besar tu cuerpo- le pedí"